La intervención del productor teatral Pepe Cibrián Campoy generó aplausos y emociones en el recinto. Citó a García Lorca y habló de la historia de la Iglesia Católica y su discriminación hacia las mujeres. El debate por el matrimonio entre personas del mismo sexo continuó ayer en Argentina durante una sesión en el Senado. Aunque la votación final tendrá lugar el 14 de Julio, el parlamento está dando cabida a distintos actores sociales para que expresen su posición sobre el tema y ayuden, a su vez, a formar opinión entre los propios legisladores.
El discurso del conocido productor teatral Pepe Cibrián Campoy fue uno de los más encendidos de la jornada. El artista se expresó sin eufemismos, citó el caso de un hombre gay que no pudo heredar tras la muerte de su pareja y habló de los derechos de los niños a tener un hogar.
Cibrián Campoy también se refirió a los argumentos eclesiásticos contra las uniones homosexuales y equiparó la situación actual de las parejas gay con la de las mujeres, consideradas sin alma por la Iglesia Católica hasta el año 585.
La intervención culminó con la lectura de “Marica”, unipersonal de Cibrián Campoy que evoca las últimas horas del poeta español Federico García Lorca, enfrentado a su verdugo.
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